Patim ha ejecutado cinco programas dirigidos de forma específica a población reclusa, personas en semilibertad y quienes deben cumplir trabajos a beneficio de la comunidad. Cada uno con objetivos bien distintos: sensibilizar sobre la igualdad de género a hombres privados de libertad, contribuir a la deshabituación e incorporación social de la población reclusa y exreclusa a través de la formación en Tecnologías de Comunicación e Información (TIC), favorecer su integración laboral, ofrecer una atención psicosocial a quienes tienen un problema con las adicciones y colaborar en el cumplimiento de penas privativas de derechos (TBC). Todos estos programas se han ejecutado en 2022, dentro y fuera del ámbito penitenciario, financiados por el IRPF estatal y se han gestionado a través de UNAD.
En el interior de los dos centros penitenciarios ubicados en la provincia –Castellón I y Castellón II- se han llevado a cabo talleres de nuevas masculinidades para hombres. Se han revisado conceptos vinculados con la construcción de roles de género, micromachismos y masculinidad tóxica para reforzar la prevención de la violencia de género. Patim también colabora en el cumplimiento de penas privativas de derechos y TBC. /p>
Otros dos programas se han dirigido a favorecer las capacidades y formación de las personas en semilibertad para su integración laboral (SIL) así como la actualización de conocimientos en el manejo de las tecnologías digitales. Este último objetivo, se ha abordado a través del programa INCORPORA-T. “Las TIC pueden construir de forma positiva a su desarrollo personal e intentamos cultivar entornos y experiencias que minimicen las amenazas y maximicen las oportunidades, ayudándoles a realzar al máximo su potencial humano”, explica la técnica de Empleo de Patim, Luisa Arenós.
En el ámbito de las adicciones, el centro de día de Patim también se alinea como un recurso especializado al que pueden derivarse personas que presentan una conducta de abuso de drogas y que están en régimen abierto o en libertad condicional, para que el equipo terapéutico realice un abordaje psicosocial. /p>
